Traducido
del idioma inglés, coaching significa
entrenamiento.
De
acuerdo a la definición del International Coach Federation “El
coaching profesional es un proceso de acompañamiento reflexivo y creativo con
clientes que les inspira a maximizar su potencial personal y profesional".
En el proceso de coaching interactuan dos personas; el coach o entrenador,
quien es el acompañante en este camino de autodescubrimiento y el coachee, la
persona que recibe el entrenamiento, conocimiento y competencias que necesita
para mejorar.
Existe un sinnúmero de
beneficios para quienes deciden iniciar un proceso de coaching. Pero uno de los
más relevantes es el autodescubrimiento, en donde el individuo toma conciencia
de sus verdaderas creencias, valores y virtudes. Dentro de ese proceso de
conciencia que se va fortaleciendo a lo largo de las sesiones, está también la
aceptación de aquellos aspectos de la personalidad que son considerados como
negativos a nivel individual y muchos no aceptados socialmente. Lo importante
de este autodescubrimiento es que al reconocerlos se logran adoptar posturas
que llevan a la reflexión y con ello a un proceso de mejora continua del Ser.
Para
obtener resultados exitosos en un proceso de coaching, primero
es importante definir metas muy concretas, determinar los comportamientos observables asociados a ella, al igual
que garantizar que éstas sean realistas y oportunas.
La
identificación de la situación real que está viviendo el coachee, esto es: ¨En donde se encuentra y hacia donde desea
ir¨, es parte esencial del proceso, al igual que explorar las opciones que
se tienen para llegar a ese lugar, es decir, identificar las acciones que se
deben ejecutar. Finamente, una vez conocido el camino que se debe recorrer para
llegar a la meta, el paso siguiente es el compromiso que el coachee genera
consigo mismo para iniciar su plan de acción.
Frecuentemente,
el número de sesiones establecido para el proceso de coaching está entre 8 y 10
sesiones, tiempo en el cual el coachee en compañía del coach, determinará si el proceso
finaliza antes o si es necesario incluir más sesiones. Cada proceso es adecuado
a la medida de cada cliente y de acuerdo a las necesidades que cada persona
tenga.
El
desear una vida más equilibrada, reducir los niveles de ansiedad y estrés, lo
que conlleva a una mejor calidad de vida, hacen parte de lo positivo de
realizar un proceso de coaching. Asimismo, contribuye a la mejora de las
relaciones interpersonales, el desarrollar o fortalecer las habilidades
conversacionales y el manejo adecuado de las situaciones críticas, lo que lleva
al fortalecimiento de la inteligencia emocional.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario